Enrique Daza

Cedetrabajo

La expansión del Coronavirus por todo el orbe ha sucitado muchos debates sobre su origen, efectos y consecuencias futuras. Con respecto a su origen no existe una sola versión y es un tema abierto que seguramente en algún momento la ciencia acalarará para establecer si viene de algún ser vivo o fue creado en un laboratorio, si las diferentes variantes y mutaciones del virus pueden ayudar a reconstruir su historia y diseminación, si se propagó por accidente o fue deliberadamente difundido. Si hay alguna razón particular para su inicial expansión en Wuhan, en Iran y el norte de Italia. Esta en discusión, la forma de combatirlo, si una persona puede reinfectarse y –lógicamente- cómo cambiará la sociedad después que pase la pandemia y cuáles serán sus efectos económicos, políticos y geopolíticos. Tambien resulta una extraña coincidencia que haya surgido justo antes de la celebración del año nuevo en China, cuando millones de personas se movilizan en todo el país

Los últimos datos dan indicios de que el Coronavirus pudo haberse extendido en varios lugares durante el segundo semestre de 2019. En Italia se presentaron casos a finales de 2019, en Beijing se trataron algunos casos provenientes de Mongolia interior en octubre y en Estados Unidos se descubrieron casos de muertes a comienzos de febrero, apenas unos días despúes de que el 23 de enero, China declarara la cuarentena en Wuhan, ciudad de 11 millones de habitantes y después en toda la provincia que tiene la misma población que Italia.

El gobierno de Trump desde 2017 tuvo informes sobre un eventual peligro de pandemias y recibió de los gobiernos anteriores protocolos y criterios que preveían la línea de acción en caso de presentarse una. Pero Trump, en contra de todo criterio científico, desfinanció casi todo el programa de prevención de enfermedades infecciosas y de virus animales que puedan infectar seres humanos y desmanteló la oficina establecida por el gobierno anterior en la propia Casa Blanca para hacer seguimiento a posibles pandemias.

En China se presentaron los primeros casos a partir del 17 de noviembre, sin detectar su origen, y hasta que el 30 de diciembre se determinó que habia una nueva epidemia, Mientras que EEUUformó un grupo para seguir el problema que incluyó al director del Centro de Control de Enfermedades Robert Redfield, al secretario de Salud Alex Azar y al virólogo Anthony Fauci. El tres de enero, Redfield recibió una advertencia de colegas chinos sobre el nuevo virus. El gobierno chino informó a la OMS el 31 de diciembre. El 9 de enero, el gobierno de China identificó públicamente al nuevo virus como un tipo de coronavirus hasta ahora desconocido y el 12 de enero publicó para todo el mundo su genoma del virus.

La Organización Mundial de la Salud emitió su primera guía con recomendaciones para limitar la expansión global de la infección y el 30 de enero la calificó como una emergencia global.

El 20 de enero, casi al mismo tiempo, Corea y Estados Unidos anunciaron su primer caso de la covid-19. Corea movilizó todos sus recursos para testear masivamente a la población y ordenó una cuarentena nacional, igual conducta asumieron los países de Asia oriental

El 24 de enero, el presidente Trump elogió a China por su «transparencia» y su esfuerzo por contener el virus. Seis días después, el Secretario de Comercio Wilbur Ross dijo que el corona virus va a ser bueno para la economía del país, porque va a afectar la economía china. El secretario de Salud, Azar, logra hablar con Trump y le advierte que la epidemia china se está transformando en una pandemia. Trump le contesta que no sea alarmista, habla del “virus chino”, minimiza el peligro y comienza una seríe de declaraciones erráticas y equivocadas, que indudablemente confundieron a la opinión y en últimas facilitaron los contagios y las muertes.

De allí en adelante los diferentes países respondieron a su manera en una situación que todavía esta en curso y cuyos resultados no pueden evaluarse totalmente. Sin embargo, ya hay algunas lecciones que pueden aprenderse. Los países que mejor respondieron son aquellos que tenían un sistema de salud público, sólido y con suficientes recursos. Estos países masificaron las pruebas, dispusieron de cupos en los hospitales, suficientes Unidades de Cuidados Intensivos, mascarillas y ventiladores.

Los países que tenían una información actualizada sobre su población y un desarrollo digital, pudieron hacer seguimiento a los contagiados, sus relaciones, sus movimientos y dar instrucciones a la población, contrasta esto con la situación de Colombia con bajo cubrimiento de Internet, ausencia de bases de datos completas, especialmente sobre la población pobre.

Los países con una menor deuda y menor déficit presupuestal pudieron dedicar más dineros a la atención de la pandemia, por eso países como Chile y Perú han podido dedicar más recursos a atender la emergencia

La fortaleza del Estado, es decir la capacidad de concentrar energías y recursos, disponer rápidamente de recursos nacionales, movilizar personal de salud de cualquier región para apoyar los lugares críticos, ha sido un factor clave. En Colombia y otros países falta coordinación con las regiones, se quiere obligar al personal de salud a prestar sus servicios sin tener las condiciones de bioseguridad y se anuló practicamente la actividad del Congreso de la República.

Aquellos países en los cuales priman los valores de cooperación y de solidaridad, y la población ha sido educada en la primacía de los intereses colectivos sobre los individuales, han tenido la disciplina social necesaria para abordar períodos largos de cuarentena. En aquellos en los cuales el individualismo y la competencia son los valores supremos se dificulta la colaboración de la ciudadanía.

La dependencia de las cadenas mundiales de sumistros o de valor se convirtió en un factor de debilidad, que dificulta la prevención, la alimentación de la población y obliga a tener más contactos sociales nacionales e internacionales.

La infraestructura tecnológica, la capacidad investigativa, la disponibilidad de laboratorios y científicos ha sido un factor que ha tenido y tendrá una importancia crucial. Elementos como mascarillas, ventiladores y otros insumos que no requieren un avanzado desarrollo tecnológico pudieron ser producidos localmente y con ellos contibuir a amainar el desempleo en lugar de estar importándolos a altos precios.

Los países en los cuales se tuvo en cuenta en el centro de la definición de políticas a la comunidad científica han sido mas exitosos, aquellos en los cuales primo la actitud caprichosa o la improvisación de los gobernantes han sido los mas perjudicados.

A pesar de los miles de tratados internacionales en diferentes áreas, se ha puesto de relieve la necesidad de la cooperación contra una amenaza universal, las actitudes guerreristas, el intento de aprovechar la pandemia para ganar terreno en la pugna geopolítica. La solidaridad y el apoyo mutuo, especialmente a los países regiones y poblaciones mas vulnerables, se abre camino en medio de muchas dificultades, que se reflejan en las sanciones económicas, la hostilidad e EEUU hacia China Rusia e Iran, los enfrentamientos entre los países del norte y del sur de Europa, el enfrentamiento entre el gobierno de Duque y Venezuela entre otras. Las amenazas propagandisticas de pedir compensaciones a China por la expansión del virus cuando esta y otros países han tenido un comportamiento solidario, de apoyo material, suministro de información científica y compartir su experiencia, mientras que un conjunto de países reaccionaron tardíamente, han carecido de espíritu solidario y subestimaron la amenaza

La debilidad estructural de economías como la colombiana, sin capacidad científica, con una mayoría de la población en la informalidad, un sistema de salud privatizado, un gobierno incompetente y un sistema productivo raquítico pueden hacer que esta crisis sea la peor en la historia del país.